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Ya hace más de 20 años que Laia Panyella, una joven estudiando de Ciencias Ambientales, se acercó al Tintero, una imprenta cooperativa del barrio de Huerta de Barcelona: «querría hacer un estudio sobre vuestro impacto ambiental». «El nuestro qué?» le respondieron. «Nosotros no tenemos impacto ambiental». «Si me dejáis que lo estudie...».
Así fue como un año después descubríamos el peor diagnóstico. Y así fue, precisamente, como empezó esta aventura, propuesta, y práctica, que ahora decimos ecoedición.
"La base de la ecoedición es calcular, minimizar y comunicar. De las tres acciones, la más importante es la minimización"
La ecoedición es una práctica innovadora para el sector editorial basada en el cálculo, la minimización y la comunicación del impacto ambiental de los libros en papel. Un ejemplo: en 2021, Polen ediciones publicaron 14 títulos diferentes de los cuales se imprimieron en 13.000 ejemplares. En total emitieron a la atmósfera 15 toneladas de CO₂. 15 toneladas son muchas, pero para tener unos datos comparativos, sería la misma cantidad que emitimos si utilizamos Google durante 8 horas, o si enviamos 300.000 correos electrónicos con un adjunto.
Según la cuenta de Twiter que monitoreaba (hasta que Elon Musk lo suspendió) los desplazamientos en jets privados de las celebrities, @celebjets, la media anual de emisiones de cada una de ellas es de 3.376,64 toneladas. Es decir, el mismo que emitiría Polen ediciones en 225 años.
Decimos que el ecoedición es calcular, minimizar y comunicar. De las tres acciones, la más importante es la minimización. El libro ecológico no existe. Como casi cualquier actividad humana siempre tendrá un impacto ambiental negativo, pero como que entendemos que tiene un impacto cultural positivo, se trata de minimizar los negativos. Calculamos para saber donde tenemos que reducir, y poder establecer unos criterios. Si los 14 títulos de Polen ediciones se hayan impreso en un país asiático, las emisiones hubieran aumentado un 700%. Por eso, el primer criterio es el de la producción local, imprimir en el territorio de distribución.
El segundo criterio es el del uso de papel 100% reciclado puesto-consumo y/o certificado es una propuesta que garantiza el origen social y ambiental en la gestión de los bosques. Y finalmente, el tercer criterio fundamental es lo del cálculo y comunicación de la huella de carbono. Por eso, el Instituto del Ecoedición dispone de la bookDAPer, una calculadora única y específica para el sector editorial que nos permite localizar los aspectos donde podemos tomar medidas de ahorro, a la vez que generamos una información para la persona lectora. La bookDAPer también es la herramienta de verificación de la práctica de ecoedicinó de las editoriales e imprentas catalanas a través del sello del ecoedición.
