El 15 de junio empieza la prohibición de hacer trabajos forestales que generan restos vegetales salvo que se disponga de una autorización correspondiente. Toda la cadena de valor del sector forestal es perfectamente consciente que aunque los últimos años han sido favorables en Cataluña desde el punto de vista de la poca superficie forestal afectada por incendios, esta situación puede cambiar en cuestión de horas por un descuido o una negligencia y puede desaparecer una parte importante del patrimonio natural del país, provocando pérdidas millonarias tanto por la propiedad forestal como para el conjunto de la sociedad que se beneficia de los múltiples y valiosos servicios que ofrecen los bosques catalanes.
La gestión forestal sostenible llevada a cabo por los propietarios públicos y privados de poco servirá si los bosques acaban siendo consumidos por los incendios en pocas horas. Los incendios forestales, además de provocar la deforestación y pérdida de hábitats, son también responsables del 20% de las emisiones de dióxido de carbono que se producen como consecuencia de la actividad humana.
Desde este punto de vista los miembros de PEFC Cataluña quieren hacer un llamamiento a la implicación activa de la ciudadanía y a todas las instituciones de la gran importancia que tiene informar de la normativa de prevención de incendios forestales para disminuir las conductas de riesgo.
Trabajamos para proteger el bosque y lo hacemos pensando en las personas.
